Tras permitir que la serie se alargara más de lo previsto, Al Horford y los Celtics estaban ansiosos por liquidar a los Hawks con un Horford se cercioró de que no hubiera un séptimo partido.
El dominicano de 36 años encestó un triple crucial en contra de su exequipo y Boston marcó una diferencia en los minutos finales de un apretado encuentro para derrotar el jueves 128-120 a Atlanta y definir 4-2 su serie de Playoffs de primera ronda.
Los Celtics habían dilapidado una ventaja de 13 puntos en el cuarto periodo del quinto partido. Ello les impidió finiquitar la serie en Boston, pero en esta ocasión no iban a dejar pasar la oportunidad para sellar su pase a las semifinales de los Playoffs de la conferencia
“Hablamos de que debíamos definir el partido”, dijo Horford. “Sentí que en el último partido, estuvimos bien casi todo el tiempo. Pero esta noche nos urgía hacer las cosas. Entendimos lo importante que era lo alargar la serie”.
Los Celtics, segundos preclasificados de la Conferencia Este, se medirán a los 76ers de Filadelfia, que han estado descansando dese que completaron una barrida en cuatro partidos en la serie ante Brooklyn el sábado pasado.
Boston montó una ofensiva de 11-0 que incluyó tres triples consecutivos — de Jayson Tatum, el de Horford, y de Jaylen Brown, respectivamente. Tatum coronó la racha con una clavada que puso a los Celtics al frente 121-113 a falta de 2:07.
En un duelo tan ajustado, una ventaja de ocho puntos pareció de 80. Hubo en el encuentro 22 volteretas en el marcador, que estuvo empatado en 15 ocasiones.
Brown encabezó a los Celtics con 32 puntos, mientras que Tatum añadió otros 30. Horford, quien jugó en Atlanta desde 2007 a 2016, contribuyó con 10 tantos y 12 tableros.
Después de comandar un improbable triunfo de los Hawks en el quinto partido de la serie en Boston, Trae Young se quedó sin gas en la segunda mitad. Falló 12 de sus 13 disparos que intentó en los últimos dos cuartos.
Young finalizó con 30 puntos y 10 asistencias, pero encestó apenas nueve de 28 tiros de campo. Ahora está ansioso por jugar una temporada completa bajo las órdenes de Quin Snyder, quien tomó las riendas de Atlanta tras el despido de Nate McMillan, cuando restaban sólo 21 partidos de la campaña regular: “Quin es el futuro”, dijo Young. “Creo que, con él acá, esta ciudad va a ganar un campeonato”.