Este miércoles se llevó a cano la cuarta etapa del Giro de Italia en lo que fue el primer encuentro con la montaña. La fuga fue la gran protagonista del día con licencia concedida por el pelotón y se disputaron el triunfo en la escalada: al final se deshojó la margarita entre Aurelien Paret-Peintre (triunfo de fracción) y Andreas Leknessund (nuevo líder).
Era un trazado de 175 kilómetros con tres puertos de montaña de segunda categoría. Desde el principio fue duro el armado de la fuga y solo siete corredores resistieron a la escapada. Los colombianos Éiner Rubio y Santiago Buitrago lo intentaron, pero al final se rezagaron al grupo principal.
La fuga siempre tuvo ventaja de casi 4 minutos a lo largo de la etapa y Quick Step cumplió con el cometido de ceder adrede la maglia rosa de Evenepoel para evitar responsabilidades en toda la carrera. Esto haciendo claridad que obviamente la recuperará más adelante porque el actual líder será de transición.
La definición de la etapa se dio entre los siete corredores que al son de los ataques se fueron quedando y todo quedó entre Leknessund que aspiraba a ser líder de la general y Paret-Peintre que quería la etapa. El Quick Step dejó solo a Remco e Ineos tomaba la responsabilidad en el pelotón para reducir diferencias.
Al final el francés del AG2R se quedó con la etapa y Leknessund se viste de líder con el ‘permiso’ de Remco Evenepoel que ya había anunciado su intención de ceder la maglia rosa a un corredor de la fuga. Respecto a los colombianos, Rubio, Urán y Buitrago llegaron en el grupo principal sin sobresaltos y escalan puestos en la general, pues hubo una fuerte selección en la última escalada.
Se viene la etapa 5 este miércoles con un territorio ideal para sprinters donde hombres como Fernando Gaviria, Mads Pedersen y Mark Cavendish buscan la revancha.