Jonas Vingegaard (Jumbo Visma), Tadej Pogacar (UAE Emirates) y Adam Yates (UAE Emirates) fueron los tres ciclistas que ocuparon el podio de la edición 110 del Tour de Francia, una carrera en la que, desafortunadamente, los ciclistas colombianos no tuvieron su mejor participación y se van con una deuda pendiente de cara al futuro.
Y es que desde un principio, la situación no fue la mejor si se mira desde el punto de vista del ciclismo latinoamericano. El ecuatoriano Richard Carapaz (EF Education EasyPost) tuvo que abandonar la carrera tras sufrir una dura caída en la etapa 1 en Bilbao, la cual generó un enorme impacto en el pelotón.
Sin embargo, el panorama se oscureció aún más con el pasar de las etapas y los ciclistas colombianos, entre los que se encontraban Daniel Felipe Martínez y Egan Bernal del INEOS Grenadiers; Rigoberto Urán y Esteban Chaves del EF Education EasyPost, y Harold Tejada del Astana, nunca encontraron el ritmo para poder estar metidos en la pelea, por lo menos, del top 10 de la general.
Chaves y Martínez sufrieron la crudeza del recorrido y, tras irse al suelo en la etapa 14, ambos ciclistas tuvieron que retirarse de la competición por los fuertes golpes que les ocasionó esta caída masiva. De los cinco colombiano que hicieron parte de la largada de la edición 110 de la Grande Boucle, ya solo quedaban tres en carrera.
La lupa sobre Bernal, Rigo y Tejada
Bernal, Rigo y Tejada quedaron como los representantes colombianos en la tercera Grande del ciclismo, pero no fue mucho lo que pudieron hacer. Si bien el ‘Toro de Urrao’ y Tejada intentaron meterse en la fuga en un par de ocasiones, especialmente, en las etapas de alta montaña, sus ilusiones de obtener una victoria de etapa o de estar en la lucha por cruzar la meta en los primeros puestos se vieron frustradas por la fortaleza de sus competidores, algo que él no tuvo problemas en reconocer a sus 37 años de edad.
Tour de Francia
Rigoberto Urán: “Ha sido la carrera más difícil de este año y nunca me encontré bien”
Por su parte, Egan también tuvo uno que otro intento de estar en la parte de al frente del pelotón, sin embargo, no se pude dejar de lado que el zipaquireño, quien ya sabe lo que es ganar este evento, viene de una recuperación tras el accidente sufrido en carreteras del departamento de Cundinamarca en el 2022 y aún no estaba en sus mejores condiciones. Asimismo, esta fue la primera carrera de tres semanas en la que se apuntaba, por lo que haberla terminado es un gran paso en sus aspiraciones de recuperar su mejor nivel y que lo de dejó una sensación de felicidad.
Si bien no se puede dejar de lado el gran esfuerzo que realizaron los ‘escarabajos’ colombianos en esta carrera y que no se sabe lo que pudo haber pasado si Chaves y Martínez se mantenían en competencia, los resultados no fueron los mejores.
Y esto no solo por la falta de una victoria de etapa, sino también porque nunca hubo un solo momento en el que esta estuviera cerca, algo que tampoco permitió que alguno de ellos estuviera cerca de los puestos de privilegio de la clasificación general o de la montaña, un terreno en el que los ciclistas colombianos están acostumbrados a brillar.
Primera vez en 10 años sin ciclistas en el top 30
Para nadie es un secreto que el ciclismo es uno de los deportes más duros que puede haber y por eso cada victoria y cada podio de los ciclistas colombianos tiene un valor tan importante. No obstante, este éxito que viene desde los años de Lucho Herrera, cuando este ganó la primera etapa en un Tour de Francia en 1984 en el Alpe d’Huez hasta el título de Bernal en el 2019, ha traído consigo una gran reputación que es reconocida alrededor del mundo entero y por la que siempre los ciclistas de nuestro país figuran entre los favoritos.
En esta edición, luego de las bajas y de las dificultades por las que pasaron tanto Rigo como Bernal y Tejada, tristemente, Colombia no pudo brillar y por primera vez en 10 años, no hubo un solo colombiano entre los mejores 30 de la general. Tejada fue el mejor de todos al ubicarse en la casilla 34 a más de 2 horas de diferencia del flamante bicampeón.
Colombia se va de este Tour de Francia con una deuda pendiente de cara a la edición del próximo año y con las alarmas encendidas para el ciclismo nacional. El trabajo para seguir preparando a más ciclistas que puedan estar al nivel de disputar la clasificación general es arduo, por lo que desde los diferentes entes deportivos tendrán que revisar en cómo potenciar a las nuevas generaciones para que no solo puedan dar el salto a Europa, sino para que puedan devolverle el brillo al ciclismo colombiano en las grandes vueltas.