La etapa de hoy ha dejado cuatro palabras que dan un parte de tranquilidad a los amantes del ciclismo: el Tour está vivo. Y para la muestra de ello, Tadej Pogacar ha desatado el ‘caos’ llevándose una jornada que no solo mostró el desgaste de Vingegaard en la fracción del día de ayer, sino que ha dado un golpe de inteligencia y el cual obligará al Jumbo-Visma a replantear las cosas de ahora en adelante.
Mientras más gente del Jumbo se ponía en la mirada de Pogacar, más el esloveno sentía las ganas de triunfar. Era él contra el planeta y, a falta de 2.7 kilómetros para coronar el Cauterets-Cambasque, el del UAE se subió a su bici, metió sexta y a partir de ahí no tuvo más nada que esperar para cruzar la meta final, lo que le permite escalar en la tabla general, quedando a solo 25 segundos del vigente campeón del Tour, Jonas Vingegaard.