Nada más al arrancar, Diego Camargo y Thomas De Gendt hicieron dupla a la escapada. Varios hombres se intentaron sumar a esa aventura, pero el mismo belga no pudo sostener el ritmo. El colombiano y Rui Costa fueron los que más lograron resistir en el frente, pero tras 30 kilómetros fueron alcanzados por el pelotón.
Así llegó el puerto de tercera categoría de Arenillas, el primero de día. Jesús Herrada (Cofidis), Oier Lazkano (Movistar Team) y Nicolas Prodhomme (Ag2r Citroen) lograron coronar primero. Ahí vino reacción que partió el grupo y dejó a unos 30 corredores en punta. Lo curioso es que entre todos ellos no hubo ni siquiera un ciclista del Ineos.
El recorrido llegó a Fuente de Rubielos, teniendo en ese alto a Marc Soler (UAE Team Emirates), Einer Rubio (Movistar Team) yJesús Herrada (Cofidis) como lo más adelantados. Lo seis minutos de ventaja que había entre ese par de lotes numerosos se empezó a desplomar y había un final en ascenso con una lucha intensa entre los especialistas de montaña.
El sprint intermedio y bonificado de Torrijas era otra gran motivación. Soler (6”), Lazkano (4”) y Andreas Kron (2”) se llevaron el botín. La subida hacia el Pico del Buitre en Javalambre sí llegó con buen tiempo de ventaja. Casi cuatro minutos de brecha sentenciaban un final exclusivo para aquellos que hicieron la tarea de irse al frente, que no eran pocos, eso sí.
A falta de cuatro kilómetros para la meta, Éiner Rubio se llenó de ímpetu y lanzó un ataque rompepiernas en el frente que nadie le pudo seguir en principio. En la zona de perseguidores, Primoz Roglic y Jonas Vingegaard le metieron presión a Evenepoel. El líder estaba en un aprieto tenaz y perdiendo más de medio minuto.
Sepp Kuss supo jugar desde atrás y asaltó la punta con dos kilómetros por delante. El estadounidense del Jumbo iba recto hacia la victoria de etapa para firmar un golpazo sobre la mesa del Jumbo. Lenny Martinez, que entró en la segunda plaza, se queda como líder de la general.