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Un par de días después de la dolorosa eliminación de Colombia en el el Mundial Femenino a manos de Inglaterra, una triste noticia sacudió al seno de la Selección por cuenta de la muerte de Paulo Carabalí, hermano de Jorelyn Crabalí, defensa y figura del equipo nacional.
La futbolista recibió la noticia 5 minutos antes de abordar su avión desde Australia hacia Colombia y fueron muchos los rumores que surgieron al respecto mientras recibía el apoyo de sus compañeras y el cuerpo técnico. En principio se habló de un ajuste de cuentas por un supuesto gota a gota y ella optó por salir a contar la versión familiar de esa muerte tres semanas después.
“No juzgo a los medios de comunicación. Pero más allá de tener su rol de informar, muchas veces se piensa en los seres humanos dependiendo de la noticia, de la familia que hay detrás. Generó mucha controversia, muchas personas pensaron cosas que no eran sobre mi hermano. No nos podemos escapar de la realidad de nuestro país, de una ciudad como Cali”, dijo la futbolista de Atlético Mineiro en diálogo con ‘Revista Semana’.
La versión de los hechos
“Siento que la maldad se está apoderando de este mundo. Delincuencia, drogas, a muchos jóvenes les quitan la vida como si fuera una moda o hobby. Los que actuamos bien no nos sentimos seguros en nuestros barrios. La Fiscalía hasta el momento no se ha pronunciado con la captura del joven que le quitó la vida a mi hermano. Son situaciones absurdas, ellos habían tenido un encuentro antes, según me enteré”.
“Cosas de jóvenes, peleas bobas. No sé si el joven estaba drogado o qué tenía en su cabeza. Él llegó a la zona a discutirle a mi hermano, que no quería problemas, porque estaba con su pareja y amigos. Los amigos lo tranquilizaron. Siguió la discusión, quería problemas, hubo un encuentro y el pelado le responde que él no pelea a puños. Él sale, va por el arma, vuelve y la novia de mi hermano lo ve y le dice: “Paulo, corra”. Lo hizo para intentar salvar su vida, pero fue imposible. Lo único que esperamos es que se haga justicia. Que no quede impune”.
La familia Carabalí conoce al asesino, quien sigue libre…
“Yo realmente no lo conozco porque no soy mucho de socializar cuando voy, me muevo en el núcleo del deporte y cuando estoy allá es con mi familia. La gente del barrio donde vivimos sí sabe de él… Doy claridad de que no fue un tema de gota a gota. Fue lo que ya expliqué”.