Arsenal ha descubierto la brutal realidad de pelearle al Manchester City el título en la recta final de la Liga Premier.
La perfección es un factor casi que esencial.
Y ahora mismo, este Arsenal dista mucho de la perfección.
Tres empates seguidos — el más reciente en casa ante Southampton, el colista del campeonato — han hecho que Arsenal pierde la iniciativa y casi que el liderato.
Las credenciales de Arsenal están siendo muy cuestionadas de cara a la máxima prueba del fútbol inglés, en lo que muchos catalogan como una final por el título: una visita al City.
“Queremos ganarlo de verdad y vamos demostrarlo otra vez mañana por la noche”, dijo el técnico de Arsenal Mikel Arteta el martes. “Pero hay que responder en el momento correcto con el rendimiento correcto, y tiene que ser perfecto”.
“Porque eso es lo que exige este momento: perfección absoluta”.
Es algo a lo que el City se ha acostumbrado en esta etapa de la temporada. Pueden preguntarle al técnico de Jurgen Klopp, cuyo punto se quedó a las puertas del título pese a sumar 97 puntos (en 2018-19) y 92 (en 2021-22) contra la maquinaria del City.
En el primero de esos duelos, el City remató la liga con una racha de 14 victorias para proclamarse campeón por un punto. La pasada temporada, la brecha entre los equipos también fue de un punto luego que el City acabó con un invicto de 12 partidos, saliendo victorioso en 10.
Y el equipo de Pep Guardiola ha vuelto a las andanzas. Con miras al choque del miércoles en el estadio Etihad, el City mantiene un invicto en todas las competiciones, llevándose 25 de 27 posibles en la liga durante el tramo.
Que Arsenal mantenga una ventaja de cinco puntos desde la cima refleja su extraordinario e inesperado arranque de temporada. Pero es un equipo bisoño, que no está curtido en lidiar con la presión de pelear por el título.
Es por eso que el City es visto como el favorito, por su actual nivel, tener un par de partidos pendientes y todo su pedigrí en estas circunstancias.
A un pregunta sobre si los nervios incidieron para dilapidar ventajas de dos goles en los empates contra Liverpool y West Ham y luego ceder dos puntos más en la igualdad 3-3 ante Southampton el viernes, Arteta respondió: “Creo que han situaciones particulares — los momentos decisivos no se inclinaron a nuestro favor. Pudo haber sido diferente”.
Como que Bukayo Saka fallara un penal ante West Ham que hubiera puesto a Arsenal arriba 3-1. O que Aaron Ramsdale le obsequiase la ventaja a Southampton cuando apenas habían transcurrido 30 segundo con un imprudente pase desde su área.
Lo que quizás más está golpeando ahora es la lesión en la espalda que padece el central William Saliba, costándoles de unos de sus defensores más seguros y que parece haber afectado a Gabriel, su compañero de zaga.
Saliba se perderá el partido del miércoles, confirmó Arteta. Y el volante Granit Xhaka está en duda tras perderse el encuentro ante Southampton por un quebranto de salud.
Pese a los recientes tropezones, Arsenal mantiene una racha invicta de 10 partidos en la liga. Arteta mantiene intacta la fe hacia su equipo.
“Estamos peleándoles de igual a igual”, dijo el entrenador español. “Estábamos advertidos de que teníamos que ir al Etihad y que luego nos tocarán cinco partidos muy difíciles”.
“¿Será lo que defina nuestra temporada? La respuesta es no”, zanjó.