El esperado anuncio de Sao Paulo haciendo oficial el fichaje de James Rodríguez por fin se dio. El colombiano ya se puso la camiseta, dio sus primeras impresiones como jugador del ‘Tricolor Paulista’ y espera por su debut. Hasta este sábado había plazo para que los equipos inscribieran sus refuerzos para los octavos de final de la Copa Sudamericana y esa era la premura del club brasileño para firmar el volante.
“A través de la planificación de la directiva, estamos contentos de traer a James Rodríguez, un jugador que no necesita comentarios, que ha mostrado voluntad y esfuerzo para integrar el proyecto de São Paulo. Tiene una fuerte conexión con Brasil y ya conocía la fuerza de nuestro querido Club. Salvemos a la Tricolor Paulista, salvemos a James Rodríguez”, dijo el presidente de Sao Paulo, Julio Casares.
Logrado el cierre de la operación, la afición aguarda por el estreno del que fue la bota de oro del Mundial que se hizo en ese país. El próximo partido de Sao Paulo es este domingo ante Bahía en el Morumbi por la jornada 17 del Brasileirao, encuentro en el que no actuará el ’10’ por ser tan próximo a su vinculación, pero sí será presentado oficialmente.
En ese sentido en el calendario hay otros tres posibles encuentros para el debut, dependiendo de la decisión de Dorival Júnior, técnico del equipo, teniendo en cuenta que James desde el 9 de abril, fecha de su última participación con Olympiacos.
Sao Paulo jugará el próximo jueves 3 de agosto, a las 5:00 p.m., hora colombiana, la ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana ante San Lorenzo. Aunque se apuró el cierre de la operación para este torneo, sería muy próximo por la falta de entrenamientos, al igual del siguiente juego del ‘Tricolor Paulista’, tres días después frente Atlético Mineiro por el campeonato brasileño.
Ante esa consideración, el día más probable para que James sume sus primeros minutos sería la vuelta por los octavos de Sudamericana ante San Lorenzo el jueves 10 de agosto el domingo siguiente, 13 del mismo mes, ante Flamengo en el estadio Maracaná, por el Brasileirao.