El delantero vive de rachas. Ya sean positivas o negativas. Sin embargo, llevarlo con calma cuando anda dulce con el gol es incomprensible. Lo dicho en días pasados por Unai Emery sobre Jhon Durán no cabe en el rompecabezas. Tras su vuelta al Aston Villa, luego de haber actuado con la Selección Colombia en las primeras fechas de los clasificatorios, ha dejado ver el olfato goleador de la joven promesa, y su más reciente víctima fue el Legia en la Conference League.
Si nos vamos al presente, gana Durán. Si nos vamos a los números, gana Durán. En la única cabeza en donde el ariete cafetero no se sobrepone al resto de la plantilla es en la de Unai Emery, y cuidado ello lleva al técnico español a agitar el árbol en las jornadas que se avecinan de la Premier League. Pero bueno, entendible que lo haga mientras el colombiano responda con goles.
Con tan sólo 200 minutos en cancha, Durán ya suma cuatro dianas en la temporada, siendo uno de los máximos artilleros del Villa junto a Leon Bailey, pero el jamaiquino le supera en tiempo de juego (436’). Razón de peso para ratificar el buen momento por el que goza el antioqueño de 19 años, y sea cual sea la competencia en la que tiene que actuar.
Ahora bien, al final será Emery el que tenga la última palabra. Durán le ha mostrado el camino fácil del gol, pero entiende que la cabeza de un entrenador va por otro. Lo único cierto es que Jhon Jader se ha quitado la camisa de fuerza que le han puesto por su edad, y partido tras partido confirma que viene pidiendo pista en la titularidad.
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