Las apuestas en el fútbol colombiano parece que están tocando un fondo bastante oscuro por cuenta de aquellas personas que pretenden ganar altas sumas de dinero amañando partidos, por medio del ofrecimiento de altas sumas de dinero a jugadores y/o jueces para que influyan en un resultado, algo que volvió a sacar a la luz pública el extécnico de Boca Juniors de Cali, Alejandro Guerrero, hace poco más de dos meses.
Ante esta situación, la cual se da, principalmente, en la segunda división del Fútbol Profesional Colombiano (FPC) y que según Guerrero se viene dando desde el 2018 se está saliendo de control: “Los amaños de partidos son situaciones que ya no podemos controlar como directores técnicos”, dijo.
Además de esta declaración de Guerrero, son muchas otras denuncias que se han presentado y que han llevado a que desde la Fiscalía se abra una que otra investigación. Así lo dio a conocer en un informe especial Noticias Caracol en la que reveló una serie de testimonios que dejan ver cómo funciona esta mafia en la que se mueven y ofrecen altas sumas de dinero.
De acuerdo a un testimonio que habló con Noticias Caracol, lo que hacen es contactarse con los jugadores para ofrecerles dinero por hacerse amonestar o hasta expulsar en determinado minuto: “Nos encontrábamos nosotros concentrados para la final del torneo de ascenso, y recibo una llamada de un número privado donde me ofrecen 70 millones por hacerme sacar a los primeros cinco minutos una tarjeta amarilla”, contó la fuente contactada por el medio de comunicación.
Y agregó: “Yo cuelgo y a los tres minutos vuelvo y recibo la misma llamada de este número. Me sigo negando y me dicen que me suben el monto a 90 millones de pesos. Yo no acepto. Sigo recibiendo insultos de este sujeto”.
No fue el único en ser contactado
Esto llevó a que el deportista decidiera indagar más sobre lo que le había acabado de suceder por lo que le preguntó al resto de sus compañeros si habían recibido alguna llamada similar: “Cuando llegamos al comedor y nos sentamos soy yo quien levanto la mano, tomo la vocería y pregunto, que levanten la mano a cuántos compañeros, y me levantan la mano dos compañeros más que me dicen que por una cantidad de tiros de esquina y de saques de banda les ofrecían una cantidad de dinero”.
Asimismo, el informe realizado por Noticias Caracol dejó clara la manera cómo estas personas que realizan este tipo de llamadas se aprovechan de la mala situación económica por la que pasan los deportistas para que accedan a hacer lo que les piden. Desafortunadamente, quienes acceden por primera vez, es muy difícil que puedan lavarse la manos, pues ellos y sus familias terminan siendo amenazadas.
De no ponerle la lupa a los amaños de partidos, no cabe duda que en cualquier momento puede salirse de control. Es por esto que la Dimayor, junto a los entes judiciales, deben trabajar de la mano para impedir que este tipo de situaciones se presenten y que el fútbol en Colombia tenga una mancha que no le hace nada bien a este deporte.