Luis Fernando Montoya es un nombre que siempre despierta pasiones y sensibilidad en Colombia por la tragedia de la que fue víctima en diciembre de 2004 cuando le dispararon en un atraco y perdió la movilidad de cuatro extremidades. Muchos rumores hubo sobre ese episodio y una posible represalia por arruinar sin intención una millonaria a puesta de la final de Copa Libertadores de ese año, pero al final de la historia el país perdió a un maravilloso entrenador.
Pero nadie le podrá quitar a Montoya de ganarle una final de Copa Libertadores al mítico de Boca Juniors en el estadio Palogrande de Manizales, y dejando grandes rivales brasileños en el camino. Y precisamente esta conquista épica cada día trae una nueva anécdota para el DT y su entorno del Once Caldas.
Esa noche hubo tremenda polémica porque Boca Juniors no se esperó en la cancha para la ceremonia de premiación negándose a recibir medallas de subcampeón, pues era el equipo más encopetado del continente y era el actual campeón. Tras el episodio, el entrenador Carlos Bianchi dijo: “No sabía que al segundo le daban medallas… Como es la primera vez que perdemos”.
El gesto de Carlos Bianchi con Luis Fernando Montoya
Después de su tragedia y ya casi inmóvil en su casa, Montoya un día recibió la visita de Carlos Bianchi en su casa; algo que el entrenador colombiano de 66 años nunca olvidará y que reveló recién en 2020 durante una entrevista con ‘Soy Deportes Radio’ y que ha vuelto a la escena desde el periodismo argentino.
“Tuve visitas muy gratas, como Carlos Bianchi donde me dice ‘profe, usted me va a disculpar, pero nosotros no recibimos las medallas de subcampeones‘. Entonces yo le dije ‘profe, tranquilo, al técnico que le duele perder se siente. No se preocupe por eso’ y me pidió una foto que yo le correspondí ahí mismo”.
Y acotó: “A mí se me quedan marcadas ese tipo de visitas y son cosas que a mí me elevan, eso me hace pensar que hay Luis Fernando Montoya para rato”.
Cerró ese fragmento dando más detalles de esa visita: “Mi esposa Adriana me dijo ‘Luis Fernando, mira que Carlos Bianchi quiere venir a visitarte’ y yo le dije que me alegraba porque yo lo admiraba mucho a él por ser un técnico tan prestigioso y ganador (4 Libertadores, 3 Intercontinentales, entre otros títulos); entonces era un honor que viniera a mi casa. Yo estaba triste por estar en esta condición, pero la sola presencia de él y sus palabras me impactaron”.