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Santa Fe ha jugado 9 partidos oficiales bajo el mando de Hubert Bodhert y cada partido deja las mismas o peores sensaciones. Un equipo sin identidad que encima se ha visto golpeado por la lesión de Rodallega y que tuvo un muy pálido mercado de fichajes en el que, además, dejó salir a su ídolo Wilson Morelo.
Y es que los nombres se han convertido en un factor diferencial para este Santa Fe que como local ha conseguido resultados positivos (sin sobrarle nada y ante rivales de muy poco peso), pero de visitante queda retratado y contra las cuerdas con presentaciones que rozan el ‘papelón’.
A Hubert Bodhert se le pueden endosar varias culpas desde la crítica en la prensa, pero también es cierto que los jugadores no están respondiendo en la cancha con detalles individuales que se salen del control de cualquier entrenador; y que en su momento ya padecieron Hárold Rivera y el propio Alfredo Arias, tanto con los fichajes de poca jerarquía como con otros jugadores que ya llevan varios semestres en el club.
Y parece que Bodhert se está cansando de esa situación, y también lo ve como la excusa perfecta para zafar de sus errores en las alineaciones de ciertos jugadores y las sustituciones. Tal y como pasó en Santa Marta hace una semana y ahora en Cali ante América. El DT ha optado por cuestionar repetidamente la técnica de sus dirigidos y en los sensibles camerinos del fútbol colombiano eso le puede pasar factura con los propios jugadores…
La descarga de Bodhert tras la fea derrota ante América
Santa Fe casi que no pateó al arco, sufrió en generación de juego y especialmente en defensa. Le cabecearon todos balones que llovieron al área propia y los dos goles en contra llegaron tras groseros errores de la defensa y de Annthoy Silva.
“No se puede trabajar, no hay mucho. Lo único que podemos hacer es recuperar al grupo. Esta semana que es larga podemos trabajar. No hay tiempo de hacer tanto, el trabajo es audiovisual: tablero y que ellos puedan desarrollar lo que se presente, pero físicamente no tenemos tiempo para trabajar el equipo”, dijo Bodhert.
El sufrimiento en la pelota quieta: “Fue un partido que se definió en la pelota quieta, y estuvimos muy mal. Luego, terminamos muy desorientados, el rendimiento de algunos de los muchachos no fue el mejor y nuestro partido no fue bueno. Quizá si fuéramos efectivos en las pelotas quietas, no nos llevamos este resultado… Yo no me reprocho por venir a buscar el partido. América me gana en la pelota quieta. Cualquier pendejada que me tiraban al área era un problema. Ante eso me queda difícil desde el banco”.
Bodhert reconoce que su plantel no es el ‘mejor’: “De alguna manera sí falta peso, quizás hay cantidad, pero falta peso sobre todo para hacer recambios. Sin embargo, eso es lo que tenemos y vamos a ‘camellar’, a mejorar y como digo, algunos no estuvieron y los recambios no son lo que lo ideal… Es un equipo que presenta irregularidad y estamos en construcción, así que hay que seguir trabajando”.
En Santa Marta también se descargó (justamente) con los jugadores
El pasado 19 de agosto Santa Fe rescató un milagroso empate ante Unión Magdalena en Santa Marta. El ‘león’ perdía 2-0 tras un vergonzoso primer tiempo con errores amateur, pero para la segunda mitad el equipo cambió la actitud y, sobre todo, mostró mejoría con los jugadores titulares en cancha. Ese día Bodhert optó por no proteger a sus jugadores de la justa crítica y sí cuestionarlos por el “juego burdo”, dejando en evidencia que solo hay 11 titulares y tiene pocos revulsivos en el banquillo y/o para la rotación.
“Yo soy sincero, en el primer tiempo faltó calidad en nuestros jugadores y en las resoluciones a nivel individual. Si no hay calidad, hay un fútbol burdo, tirarla donde sea, no se puede esperar un resultado diferente; hay circunstancias que causan estas cosas. Vamos a seguir trabajando y buscar que nuestros jugadores tengan el mejor nivel en lo que falta de la Liga”, dijo con molestia el DT.
Y luego dio a entender que, pese a la cantidad de futbolistas, su plantel se ve parcialmente reducido a un grupo seleccionado de que más o menos están a la altura de los partidos y entienden su plan de juego: “Efectivamente los jugadores que venían con mayor ritmo hicieron el trabajo, modificamos y tuvimos capacidad de reacción para sacar un partido del fondo. Eso es Santa Fe. No podemos reducir la nómina a 11 jugadores, necesitamos respuestas de todos”.
“Los muchachos lo hicieron bien, fuimos al frente, aseguramos la pelota y creamos mejores sociedades con Sambueza, Rojas, Londoño, Jersson, Rodallega. Faltó el rendimiento individual de muchos de nuestros muchachos. Esto le pasa a cualquiera, todo el mundo puede tener un mal partido. Sigo creyendo en ellos y en la medida que se llenen de seguridad van a elevar su nivel”, cerró el DT ese día ‘contra’ los jugadores.