El fútbol colombiano pasa por uno de sus peores momentos. La violencia se ha adueñado de los estadios y en tres días ya son dos hechos que han generado un gran repudio en contra de las barras que dicen ir a los estadios a alentar a los equipos de los cuales son hinchas. Primero fue en Medellín, luego de la batalla campal que se dio entre la barra Los del Sur de Atlético Nacional y la fuerza pública y, recientemente, la invasión al campo de juego y amenazas por parte de algunos seguidores del Once Caldas.
Tras la derrota ante Alianza Petrotlera en el Estadio Palogrande, la cual dejó en lo más profundo de la tabla al ‘Blanco Blanco’ con tan solo 11 puntos, varios hinchas decidieron invadir el campo de juego para agredir a algunos jugadores, no sin antes haber atacado el bus del equipo a piedra y con bolsas de sangre en la previa del duelo de la Liga BetPlay.
Esto ocasionó la reacción de Jorge Enrique Vélez, expresiendente de la Dimayor y ahora miembro de la Junta directiva del Once Caldas de Manizales, quien en sus redes sociales culpó a milicias urbanas y a la primera línea de estos hechos: “Lo de las barras bravas no es una casualidad . Creo que detrás de lo ocurrido en Medellín y Manizales hay una estrategia de milicias urbanas y primera línea”, escribió en su cuenta de Twitter.
Sus palabras sin duda generaron un gran revuelo y en palabras la la Revista Semana el dirigente deportivo ratificó lo publicado y, además, aseguró haberse dado cuenta de la infiltración de las barras cuando este era secretario de gobierno de Medellín en el 2011: “Hubo unas amenazas bastante grandes y en un clásico nos tocó cerrar el estadio y hacer por primera vez en Colombia un partido sin público. De ahí en adelante se empezó todo un proceso de sentarse con ellos y desafortunadamente eso no ha funcionado”, aseguró.
Asimismo, Vélez defendió a los barristas, pues para él “estas quieren el equipo, no son violentos, ni atacan, ni extorsionan, ni hace todas las cosas que hacen estar personas”, agregó.
“No me quedan duda de que fueron a hacer el daño y tenían preparado todo antes de empezar el partido. Hay información de la policía que fue contra ellos, inclusive un par de caballos fueron heridos. Aquí lo que hay son unos delincuentes y hay que llamarlos por su nombre”, le dijo Vélez a Semana.
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Sin embargo, Vélez fue aún más a fondo y hasta aseguró que esto hace parte de una “estrategia de la guerrilla y de la izquierda que donde vean masificar personas lo hacen y esos muchachos en su rabia de porque perdió el equipo, o no les dan las boletas, cualquiera de las circunstancias empiezan la manera de iniciar el desorden”, ya que es muy fácil llevar a cabo este tipo de acciones con “pelaos que llegan acalorados a los partidos. Algunos han consumido drogas, otros han consumido licor y obviamente es muy fácil masificar”, enfatizó.
Vélez insistió en que esto se trata más de un tema de un interés que tienen las milicias para generar caos y no de unos barristas que están inconformes con la actualidad deportiva de su club, ya que tal y como le aseguró a Semana, según él, en Colombia, si las barras estuvieran en contra de la situación de su equipo, “simplemente no irían a los estadios y dicen, nosotros estamos molesto con un equipo, entonces no vamos a ir a este partido y sería una forma de hacer cívicamente las cosas”.
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