La ‘novela’ entre Millonarios y Santos por Juan Pablo Vargas parece llegar a su fin con un trago amargo para el cuadro bogotano y el jugador. De nuevo queda en evidencia la dificultad de negociar con brasileros y sus incumplimientos, pero ahora una lesión del jugador habría sido el ‘florero de Llorente’.
Ya se había conocido que el jugador viajó a Sao Paulo para presentar exámenes médicos con Santos y posteriormente firmar como nuevo refuerzo. El equipo brasileño devolvería a Daniel Ruiz (está a préstamo) par quedarse con la ficha del apetecido defensor, pero en las últimas horas se venían echando para atrás.
Según desvelaron fuentes cercanas a Millonarios como los periodistas Carlos Antonio Vélez y César Augusto Londoño, en la tarde del martes se dio una llamada entre directivos de ambos clubes donde Gustavo Serpa daba como último plazo el miércoles para finiquitar el negocio y en parte también por el cierre de inscripciones en el mercado brasileño.
El desenlace ‘médico’ en contra de Juan Pablo Vargas
Y todo parece haberse resuelto con una lesión de Juan Pablo Vargas como ‘excusa’ y razón. El jugador sufrió una molestia en el partido como local de la fecha 2 ante Pereira hace 10 días y no viajó a Estados Unidos para el amistoso ante Crystal Palace ni a Barrancabermeja para enfrentar a Alianza por Liga. Parecía de poca gravedad, pero en Sao Paulo no lo vieron así.
Londoño reveló que Sao Pulo no pudo hacerle pruebas de esfuerzo físico a Vargas por su lesión muscular que a priori parecí solo un tirón, y entonces decidieron descartar la transferencia para evitar la inversión de dinero en un jugador del que no se conoce su real estado físico.
Así las cosas, Vargas tendría que volver a Millonarios para jugar inicialmente hasta diciembre con una posible recuperación pronta de su lesión. Eso sí, el cuadro azul sigue peleando con el club brasileño la deuda de 500 mil dólares que aún tienen por la cesión de Daniel Ruiz y/o el regreso del volante para esta temporada ante la suplencia sentenciada en Santos.