Sin aún hacerse oficial, la aventura de Juan Fernando Quintero en Junior sólo habría durado seis partidos y dejando un gol como saldo. La salida del fichaje récord del fútbol colombiano es un balde de agua fría para la directiva del ‘Tiburón’, que rompió la alcancía y apostó por el volante como eje para un proyecto.
Barranquilla amanece contrastada y se pregunta qué pasó con el ’10’. A hora de que se haga el anuncio, sale a la luz la presunta versión del jugador, quien argumentaría diferencias con Hernán Darío Gómez al no tener una misma idea de juego.
“La versión de Juan Fernando quintero. Serio distanciamiento con el DT. No comparte su manera de jugar, su estilo, su manejo y su trato. Quiere ganar títulos y cree que en no lo logrará con la idea de juego actual. Se consideró relegado y maltratado“, informó Carlos Antonio Vélez.
El mismo comunicador contrastó la versión del futbolista con la del club, el cual expone que la distancia se debió a que Quintero quería que se le comprara su pase, tasado en 1.5 millones de dólares, más la renovación de contrato, un esfuerzo económico que la institución no ve justificada.
“Quintero quería que le compraran el pase. 1.5 M de dólares. Renovación de contrato, que al precio actual, serían unos 4.5M más por tres años. En 6 meses jugo 7 partidos(mucho tiempo lesionado) lo que suponía un costo por juego de más o menos 450 millones de pesos. Se hizo el esfuerzo pero no se podía seguir con esos costos. No hay bolsillo que aguante. En el fútbol colombiano son cifras inmanejables (valores aproximados y al cambio de hoy)”, trinó el periodista.