Con poco rodaje en el 2023 debido a los juegos aplazados, en la serie de Copa Libertadores ante Universidad Católica de Ecuador, el juego que caracteriza a Millonarios se vio entre sombras y avanzó sin lucir a la fase tres. El clásico añejo era el escenario para despejar las dudas y ratificar que es uno de los equipos más trabajados en Colombia. Y así fue. Con una nómina mixta Gamero expuso la idea de su equipo y le dio un golpe certero a los vallecaucanos. Una victoria que llena de aire pensando en el partido del próximo martes ante Mineiro.
El azul no necesitó de apenas cinco minutos para mostrarle a Cali que la impronta se mantiene juegue quien juegue. En una mala salida de los azucareros le quedó a Pereira, Caldera no salió a presionar y la pasividad permitió que el volante descargara en Valencia para que este la acomodara con un hermoso zapatazo ajustado al palo derecho de Dawson.
Los azucareros reaccionaron a la anotación con un picante remate de media distancia, que a pesar de irle picando Montero desvió sin problema. El ‘Embajador’ para apagar el ímpetu de su rival inclinó la cancha y con muy buenos centros de Moreno buscó en el juego aéreo, no conectaron Valencia y Quiñones, permitiendo que Viveros aprovechara su velocidad en la contra, a la que le faltó puntería para igualar con un disparo que tuvo al ingresar al área con libertad.
Kliver levantó la pelota y también fue a conectarla. En un tiro de esquina ganó por el aire para poner el testarazo, el cual se le fue ligeramente desviado. Las sucesiones de toques empezaron a lucir en Millonarios para asediar al Deportivo. Sobre el costado del área Bertel peleó una pelota dividida, fue por el rebote Valencia y Caldera se lo llevó puesto, ocasionando un penal convertido por Pereira sobre 29 minutos. Antes de acaba la etapa inicial el tercero pudo llegar con un lindo centro de Jader, al que llegó Caldera con intención de desviar y por poco la mete en contra.
Los dirigidos por Jorge Luis Pinto, con la imperiosa necesidad de sumar, en el complemento tomaron la pelota para buscar el descuento. La premura por lanzarse al ataque dejó el bloque largo, ideal para que Millonarios triangulara y expusiera su juego de extremos. Así le llegaron dos centros a Paredes, uno que cabeceó a las manos de Dawson y otro desviado.
Con la comodidad de resultado y la oportunidad de afinar los engranajes, Gamero dio paso a Cortés y Uribe con miras al compromiso de Libertadores. Nuevamente Pereira inició abriendo para Valencia, este tocó para Fernando y el experimentado atacante le puso un pase entre líneas a Bertel. El lateral definió como un goleador, pero la acción fue invalidada por un fuera de lugar muy justo. El reloj se consumó al igual que la victoria para Millonarios con la que extiende una racha de 10 años sin perder ante Cali en El Campín. Además, llegó a 9 puntos en cuatro presentaciones.