El sueño de Corea del Sur sigue en pie. La selección asiática venció el domingo 1-0 a Nigeria en la prórroga del partido de cuartos de final jugado en Santiago del Estero y será rival de Italia en una de las semifinales del Mundial Sub20 de fútbol que se disputa en Argentina.
Un cabezazo del defensor Choi Seok-Hyun tras un córner, en el quinto minuto del tiempo suplementario, catapultó al equipo de Eun-Jung Kim a la ronda de los cuatro mejores. Ante Italia, el jueves en La Plata, la invicta Corea del Sur buscará alcanzar su segunda final consecutiva en la categoría, luego de caer ante Ucrania en el partido por el título del Mundial de Polonia 2019.
En tanto, Nigeria — que eliminó a la anfitriona Argentina en octavos — se quedó en el camino en su intención de llegar por tercera vez en la historia a la final de un Mundial Sub20 — perdió las de 1989 y 2005). Con su derrota, además, África ya no tiene representantes en el torneo.
Más tarde en la jornada, también en Santiago del Estero, Estados Unidos y Uruguay definirán al último semifinalista, por el que ya espera la revelación Israel, que en su primera participación mundialista eliminó a la prestigiosa Brasil en cuartos.
El estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero fue escenario de un partido no deseado por los hinchas argentinos. Los nigerianos evitaron el miércoles que la selección de Javier Mascherano estuviera frente a frente con los surcoreanos, que a su vez frustró en octavos el deseo de otro equipo sudamericano, Ecuador.
Y a diferencia de lo sucedido en los partidos de cuartos de final previos, Corea del Sur y Nigeria no solo no se sacaron ventaja durante los 90 reglamentarios, sino que aburrieron como consecuencia de un trámite que fue incómodo para ambos.
Está claro que tanto surcoreanos como nigerianos suelen presentar su mejor versión cuando juegan de contra. Y mutuamente supieron neutralizar esa fortaleza del rival. Como resultado de ello, y de la falta de luces de uno y otro, prácticamente no hubo situaciones de gol en el tiempo reglamentario y el cero calificó la pobre performance de los dos, más allá de que Nigeria tuvo mayor dominio del balón.
De cara a la prórroga restaba ver cuál tendría más resto físico para afrontar otros 30 minutos a esta altura de un torneo de por sí muy exigente por el poco descanso entre partido y partido. El gol de Choi a poco de iniciado el tiempo suplementario rompió el partido. A partir de entonces, Corea del Sur apostó a defenderse con la pelota. Nigeria tuvo dos muy claras para estirar la contienda a la tanda de penales, pero en ambas Umeh Emmanuel careció de puntería. El público argentino en las gradas, volcado decididamente en favor de Corea del Sur, terminó celebrando el pasaporte de los asiáticos, a modo de ajustes de cuentas con el verdugo de la selección anfitriona.
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