En un partido emotivo, que subiendo la temperatura con el correr de los minutos, el Manchester City se coronó campeón de la Champions League -por primera vez- gracias al tanto de Rodri cuando le caía la noche al elenco inglés; cuando los nervios se apoderaban de ellos y el Inter de Milán mejor se veía en terreno turco.
El muro, Ederson
En Estambul ratificó con sus atajadas el gran momento que vive en el Manchester City. Salvó en múltiples oportunidades a su equipos y ahogó el grito de gol de los italianos en momentos claves del partido. Incluso, hubo tapada suya antes del gol que les dio el título. Ederson se consagra en Turquía y a partir de ahora, seguramente, defenderá el arco de la selección de Brasil.
La frialdad de Rodri
Cuando el City la pasaba mal y no encontraba respuestas en su fútbol, le quedó el balón en el borde del área y remató con una frialdad única. ‘Capitán frío’. Puso la pelota en el único hueco que había en medio de un bosque de piernas del Inter de Milán. El que menos esperaban, les dio su primer título de Champions League.
Un Inter que les dio dolores cabeza
No fue fácil para el City. El Inter de Milán los hizo correr, luchas, les cortó los circuitos y los complicó más de la cuenta. Los ingleses no bajaron los brazos y en la más clara, la mandaron a guardar. Al final sufrieron, pero pudieron festejar.