Un caliente partido entre Deportivo Cali y Atlético Nacional dejó un lamentable hecho por la agresión que recibió el juez de línea en el estadio Palmaseca. Un objeto contundente fue lanzado desde la tribuna popular y golpeó la cabeza de
Todo se dio en el minuto 71 cuando Jhon Ospina sancionó un penal a favor de Atlético Nacional por un agarrón de camiseta en el área por parte de Kevin Salazar contra Jayder Asprilla. Una decisión polémica, pero acertada que caldeó los ánimos en el escenario de Palmira.
Ahí el juez de línea Ballesteros se ubicó en el vértice del área para cumplir su labor de vigilar la línea de gol como habitualmente se hace en un cobro penal; y mientras Eric Ramírez acomodaba el balón cayó un objeto contundente desde la tribuna sur donde estaba ubicada la barra brava Frente Radical Verdiblanco, y esto golpeó con gran fuerza la cabeza del árbitro.
De inmediato fue al suelo y el central Ospina detuvo el partido, ahí ingresó el cuerpo médico del Deportivo Cali para atender a Ballesteros y el partido se detuvo por casi 7 minutos. Hubo diálogo con el comisario de Dimayor y se creía que suspendían el partido, pero optaron por darle continuidad.
Eric Ramírez cambió el penal por gol, hizo gestos a la tribuna (1-1 en ese momento) y el partido siguió caldeado hasta el final tanto entre los jugadores como los fanáticos de todas las gradas.
Por ahora Dimayor no se ha pronunciado al respecto y se espera el boletín de sanciones del próximo miércoles donde podría haber una multa y cierre de tribuna para el Deportivo Cali.